viernes, 3 de junio de 2016

CONOCER LAS HERRAMIENTAS DEL PERIODISMO ES INDISPENSABLE PARA PODER LLEVAR EL TÍTULO DE COMUNICADOR SOCIAL
JUAN JOSÉ MURO BRENIS
UNIVERSIDAD NACIONAL “PEDRO RUIZ GALLO” LAMBAYEQUE


El presente escrito ilustrará un poco a quienes se acojan de él, a conocer algo más sobre el periodismo radial, tratado de una manera separada para un mejor entendimiento y determinación de conceptos, las diferentes alternativas que se deben tener en cuenta para lograr ser un correcto facilitador de la comunicación radial, así como para la mejor comprensión de las técnicas y las estrategias que gracias a los textos que han servido de apoyo para la elaboración de este paper, se pueden discernir.

Palabras Clave:
Comunicación no verbal, Redacción técnica, educación de la expresión oral, Proceso comunicativo.

Abstract:
This letter will illustrate some of those who adopt it, to know more about radio journalism, tried to separate for a better understanding and determination of concepts manner, the different alternatives that must be taken into account in order to become a correct facilitator of radio communication, and for better understanding of the techniques and strategies that thanks to the texts that served as support for the development of this paper, can be discerned.
Keywords:
Nonverbal Communication, Technical Writing, education of oral expression, communication process.



“No depende de qué tan buena persona sea un periodista, si no de qué tan bien use las técnicas del periodismo”, con estas palabras, María Teresa Ronderos engloba la idea de que, no solo hace falta tener un compromiso moral basado en la educación recibida en casa, si no también hace falta conocer cada una de las propuestas técnicas con las que cuenta el periodismo para poder ejercerlo de manera cabal, para poder servir de apoyo a la comunidad, y, sobre todo, para informarla sobre hechos noticiosos que crean historia y cultura en un entorno determinado; para conocer las técnicas es necesario estudiarlas, conocerlas, analizarlas, y sobre todo efectuarlas en la práctica, es necesario partir de lo científico y abstracto para llegar a lo empírico y concreto, es decir, prepararte primero con el mayor conocimiento que se pueda adquirir, para que luego en la experiencia no cometamos errores que puedan causar daños muy significativos y opuestos a los objetivos que planteamos en el momentos de establecer una comunicación de plataforma radial en un determinado contexto.

Conocer las técnicas del periodismo no te hace ni mejor ni peor profesional, simplemente te ayuda de manera fundamental en el momento de aplicarlas durante la pericia; porque no solo valen las buenas intenciones con las que se cuenta el periodista, ya que si las cosas son dichas de una manera incorrecta pueden sonar como duras ofensas o graves acusaciones, y que puede tener como efecto más perjudicial, la desinformación que causará en el público receptor.

Conocer las técnicas del periodismo, es como saber manejar las herramientas que puedan poner en marcha un auto, donde su correcto funcionamiento dependerá de la buena calibración que el mecánico haga en el motor, de esta manera la educación de la expresión oral es necesaria; algo parecido sucede en el periodismo, pero que por su magnitud “si no se sabe manejar las herramientas del oficio se pueden equivocar tremendamente y no le pueden causar la muerte a una persona, sino a varias” (María Teresa Ronderos), puesto que al hacer público algún tipo de data errónea ocasionaría daños irreparables, como la muerte.

La destreza que se debe tener para saber en qué momento aplicar alguna u otra técnica, de la redacción técnica con la que desarrolle su noticia, dependerá del ojo clínico y del olfato periodístico con los que cuente el comunicador durante las circunstancias a las que se enfrente; es recomendable en primera instancia verificar las fuentes, una y otra vez, verificar y verificar hasta asegurarse que están brindado información correcta y confiable,  la cual debe ser contrastada, preguntada a varias personas hasta encontrar errores, y seguir preguntado hasta llegar a una conclusión razonable, luego dar a conocer la fuente, quizá no de una manera directa pero si brindarle una imagen sólida y sustentable como base para la construcción de una historia periodística, finalmente la contextualización del hecho favorecerá al mejor entendimiento de la noticia, a crear la atmósfera adecuada para poder contar con detalles lo sucedido, lo que no significa recargar de información poco valiosa y difícil de procesar en tan poco tiempo que dura la emisión de un boletín radial, si no que se deben tener muy en cuantas los ¿cómo?, ¿cuándo? y ¿dónde? De cada suceso, lo que permitirá contar la historia de una manera, clara, correcta y concisa.

Algo que debemos tomar en cuenta también, es la transparencia con la que se dicen las cosas, según el libro Ojos Frescos y Bien Abiertos que es un compendio a manera de manual hecho  en coordinación principal con Andrés Cañizález, se afirma que hacer las cosas más transparentes en una sociedad, debería ser una de las prioridades de cualquier periodismo, sin embargo, lo que se viene observando en los gobiernos de algunos países -lobbismo  político- es una degradación de la calidad periodística, en la medida en que el trabajo se ha reducido a la mera reproducción de lo que dicen las fuentes, las cuales están intrincadas con el poder y manchadas con la corrupción, lo que hace que se divulguen lo que desean que sea conocido y lo que les conviene; bajo estas circunstancias cobra vigencia la necesidad de un periodismo que elabore una agenda propia y tenga muy clara su responsabilidad para con la sociedad y el sistema democrático, entonces, es válido recordar que sólo con periodistas responsables y conscientes de su rol, podrá cimentarse genuinamente la democracia.




 Pero en ambientes hostiles o sociedades en conflicto, donde le proceso comunicativo se ve interrumpido por diferentes razones de índole política, económica o social, ¿qué es lo que debería hacer un periodista para ser trasparente sin que la temida CENSURA les llegue a su alcance? Pues la respuesta es muy directa: COMBATIRLA, y solo está dada para los valientes que, basados en sus conocimientos de técnica periodística y en su determinación como comunicadores sociales, se emprendan en una dura lucha. Una de las censuras más directa y más brutal es el terrorismo, la que es posible combatir mediando dos aspectos: eliminando el ego, el afán de tener las primicias y exclusivas de todo, y, trabajando en conjunto con los demás colegas que también viven la misma realidad, ya que es menester de ellos trasmitir la misma información durante un mismo espacio de tiempo para que así los acusados no puedan tomar represalias hacia una persona determinada, ya que “esto no se hace a costa de héroes, porque un periodista heroico hoy, mañana ya no puede informar, entonces no sirve” (MaríaTeresa Ronderos). Otro tipo de censura es la económica, considerada invisible, es cuando los auspiciadores te abandonan por el hecho de no seguir su línea estratégica, afortunadamente, vivir la tecnología en pleno siglo XXI hace que el postear algo en Facebook o twitter o publicarlos en un blog, se haga sin el miedo de perder algún sponsor puesto que las redes sociales son gratuitas, de esta manera no se pierde la principal función del periodismo. Finalmente una censura muy peligrosa, y a consideración personal como la más letal, es la censura del periodista, en la cual el mismo individuo se blinda en la ignorancia solo por el hecho de no querer informarse, algo lamentable y poco loable.

Frente a los casos anteriores de censura, se debe tener en cuenta que lo primordial es proteger la libertad de prensa, cuya función principal es “controlar el poder, vigilar el poder, denunciar aquello que está mal, hacerse de la voz de los que no tienen voz para poderle hablar duro al poder” (María teresa Ronderos); vivimos en una actualidad donde se pueden llegar a considerar a los periodistas como enemigos, solo por ser críticos, por ejercer su rol como prensa, por  estar atentos a las cosas que se manejan de manera inadecuada con el poder y por defender sobre todo la democracia. 

Sin lugar a dudas, conocer y poner en práctica las técnicas del periodismo ayudan de manera efectiva en una correcta trasmisión de mensajes a un público que es heterogéneo y cambiante, pero también debemos de considerar que el papel del emisor es importante en la misma medida, específicamente el rol que desempeña un locutor de informativo radiofónico, como lo dice José Luis Fernández en su libro Los Lenguajes de la Radiodonde le da la relevancia necesaria al profesional del micrófono, a quién se le ha considerado como un canal de comunicación personal y muy íntimo, el locutor sin nuestro permiso llega a la habitación y nos habla como si estuviese frente a nosotros; se convierte en compañero de viaje en el automóvil, autobús, ferrocarril, crucero, etc. se introduce por todos los rincones de nuestra casa, vive todo el tiempo en nuestra cocina hogareña y sin conocernos personalmente nos sigue a todas partes a través de una bocina traductora de imágenes acústicas. Es el profesional quien a través de su voz, imprime su sello personal a todo lo que describe, narra o comunica. Y como lo afirma Silvia Bernal en su libro Manual de Capacitación en Radio por esa virtud y otras tantas que posee la voz, el locutor sabe imprimirle vida a su paralingüística particular (intensidad, tonalidad, timbre: ritmo, melodía y dinámica), y permite al usuario de la radio elaborarse una imagen de su aspecto físico, personalidad, conducta, confiabilidad en lo que dice y expresa, en su espontaneidad y talento. 

Detalles como el tono de voz, “en una frecuencia de 89-90 Hz en las voces masculinas y de 171 Hz en las femeninas”; la variación tonal “donde se muestra variedad pero siempre dentro de unos límites”; la velocidad “considerada la más agradable para los informativos radiofónicos, la que es  moderada (26, 4 segundos)”; utilizar una comunicación no verbal, que si bien es cierto no se trasmite de manera directa mediante los canales radiofónicos, pero que si se trasluce a través de la bocina como inflexiones de voz, resonancia, etc. en momento de transmitir un mensaje y que es muy necesario para el correcto entendimiento del mismo,  y la pronunciación “donde se exigió de los locutores que no incurrieran en errores de articulación, al considerarlos incompatibles, no ya con la información radiofónica, sino con el propio trabajo de locutor” (Dra. EmmaRondero Antón)

Para concluir, es necesario comprender que las mejores técnicas son las que cada uno descubre en la práctica, para ello la labor del tiempo el cual determina la experiencia es fundamental para que alguien se consagre como un buen comunicador; es el conjunto de experiencia, humildad y convicción en ideas propias, la que forma cual barro en mano del alfarero como un correcto facilitador de la comunicación social.


REFERENCIAS
·        -Entrevista de Genaro Rodríguez Navarrete a María Teresa Ronderos. “El periodista tiene que verificar y verificar” (2009). http://www.saladeprensa.org/art856.htm
·       -Estudio práctico: Los principales errores que debe evitar todo locutor de informativos radiofónicos.  Dra. Emma Rodero Antón (Texto publicado en las Actas de las XV Jornadas Internacionales de la Comunicación, Facultad de Comunicación, Universidad de Navarra).
·       - Bernal, S. (2009). “Manual de capacitación en radio”. Rojo J&M. Santa Cruz, Bolivia.
·        -Cañizales, A. (2004). “Ojos frescos y bien abiertos”. Bimedia 21 Diseño Editorial C.A. Venezuela.
·        -Fernández, J. (2000). “Los lenguajes de la radio”. Editorial Prisma. Colombia. 


Entrevista a Oswaldo Echevarría Cruzado, docente de Redacción Periodística de la Escuela Profesional de Ciencias de la Comunicación de la Universidad Nacional "Pedro Ruiz Gallo" de Lambayeque - Perú.